Eva Bellido // Oropesa
La desaladora ya proporciona el 100% del caudal de agua potable necesario para el consumo diario de los vecinos de Orpesa.
Así lo ha dado a conocer el Ayuntamiento a los residentes del municipio, a través de un bando, que también colgaron en las redes sociales.
La alcaldesa, María Jiménez, destacó que la calidad del agua que ahora consumen los oropesinos «ha mejorado sustancialmente», una vez transcurrido el periodo de dos meses establecido para comprobar que la infraestructura funcionaba en perfectas condiciones a pleno rendimiento.
En cuanto a sus características, descienden notablemente las concentraciones de cloruros y sales del magnesio y calcio, lo que reduce su dureza y «mejora su sabor y calidad. De hecho, es buena para beber, con gran diferencia con la anterior», afirmó.
Muestra de ello, es que en el Ayuntamiento ha dejado de comprarla embotellada y ha instalado unas fuentes para tomar el agua desalada. Además, se alargará la vida útil de los electrodomésticos, ya que no será necesaria el uso de descalcificadores.
1,6 millones para el año 2020
El Ayuntamiento de Orpesa ha consignado una partida de 1,6 millones en las cuentas para el 2020 para cubrir el coste del agua desalada, según explicó la alcaldesa, María Jiménez.
De esta cifra, se prevé recuperar 900.000 euros por la venta a los vecinos. El resto corresponde al consumo en los espacios públicos y el mantenimiento de la red.
El volumen fijado con Acuamed para consumir en el primer año de convenio transitorio es de 3,2 millones de m3. Y sobre la amortización de la desaladora, pedirán que la asuma el Gobierno central.
Puesta en marcha del servicio
Fue el pasado 2 de agosto cuando la planta construida por Acuamed, en el límite con el término de Cabanes, empezó a suministrar una pequeña cantidad a la red municipal de Orpesa.
Una época, la estival, en la que la localidad turística precisa un mayor caudal para abastecer a una población que pasa de los 10.000 habitantes del año a los 120.000 del verano.
Además, las últimas analíticas realizadas hasta el momento no obtenían resultados satisfactorios, como reconoció la alcaldesa Jiménez, por lo que urgía comenzar a consumir la desalada, ante la posibilidad de declarar no potable la anterior.
En su inicio, el caudal suministrado por la planta se mezclaba con el procedente de los pozos que han aprovisionado del líquido elemento al municipio en los últimos meses.
«Desde ese día, la desaladora ha ido poco a poco aumentando su producción de agua, con lo que se ha ido consiguiendo progresivamente una mayor calidad de la que se distribuye por la red de la localidad», tal como explicó la munícipe.
En la actualidad, la nueva infraestructura proporciona el 100% del agua potable en la práctica totalidad del término, a excepción de las urbanizaciones de la zona sur, es decir, las más próximas a Benicàssim, como Platgetes y Torre Bellver, «porque la conducción aún no está acabada», matizó.
«Esperemos que esté lo antes posible. Estamos en contacto con la firma Acuamed, presionando para que se den toda la prisa que puedan para que el 100% del territorio de Orpesa tenga este agua», concluyó Jiménez.