TURISMO Servicios playas
El secretario de Turismo avala el esfuerzo conjunto entre administraciones al explotar recursos propios
R.D. // ORPESA
El secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, ha visitado hoy Oropesa del Mar con motivo de la instalación de dos nuevos servicios en la playa de La Concha.
Acompañado del alcalde Rafael Albert, y de diferentes concejales del equipo de gobierno, ha comprobado cómo el área de descanso dentro del mar y los recién instalados vestuarios ya funcionan a pleno rendimiento.
La infraestructura marítima y las casetas-vestuarios de colores son una apuesta de la Agencia Valenciana de Turismo para seguir explotando los recursos propios, apostando por uno de los principales motores de desarrollo en la provincia como es el turismo.
En este sentido, el secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, ha reconocido «el esfuerzo conjunto entre la administración autonómica y la local por mantener en auge el turismo que cada año reciben municipios como Oropesa del Mar, ofreciendo propuestas interesantes a quienes nos visitan y a los que todavía no lo han hecho».
Por su parte, el primer edil Rafael Albert ha agradecido la visita del secretario autonómico de Turismo a la localidad y la inversión que ha llevado a cabo en la playa de la Concha. La Agencia Valenciana de Turismo ha elegido esta playa por ser una de las más resguardadas, de igual manera que se están eligiendo otras playas, también protegidas, de la costa castellonense. Los nuevos servicios están a disposición de todos los bañistas.
La zona de descanso dentro del mar consta de 24 sillas, con un toldo para protegerse del sol; una barandilla de acceso al mar y tres carriles delimitados con boyas para practicar la natación.
Por otra parte, los vestuarios ofrecen un servicio a los bañistas para cambiarse de ropa en un espacio reservado a la intimidad de cada uno. Exteriormente, la vistosidad de su colorido contribuye a embellecer el paisaje costero.
La visita ha concluido en el Ayuntamiento, donde el alcalde ha hecho entrega al secretario autonómico de Turismo de un grabado de Ripollés, perteneciente a una serie limitada que el artista castellonense hizo inspirándose en la Torre del Rey, una de las fortificaciones más emblemáticas de la localidad.