El Ayuntamiento de Oropesa del Mar ha acogido una reunión informativa con empresarios de la localidad para informarles sobre el Pacto Territorial para el Desarrollo Local y el Empleo Plana Alta Nord, formado por los municipios de Oropesa del Mar, Benicàssim, Cabanes, Benlloch, Serra Engarcerán, Torreblanca, La Torre d’Endoménec, Vall D’Alba y Vilanova d’Alcolea. El alcalde, Rafael Albert, y la concejala Arantxa Martínez estuvieron presentes en la jornada.
Este Pacto Territorial, constituido en septiembre del año pasado, nace con la premisa de que tras la puesta en funcionamiento del Aeropuerto de Castellón, las localidades que lo rodean comparten un eje de dinamización económica social y cultural. El encuentro fue dirigido por el especialista en desarrollo local y empleo Marc Caballero; y en él se analizó la realidad socioeconómica actual de la zona y las estrategias socioeconómicas a seguir en el futuro.
El Pacto Territorial para el Desarrollo Local y el Empleo Plana Alta Nord nace a iniciativa de la Agencia de Empleo y Desarrollo Local de Oropesa del Mar, que inició los contactos con los distintos municipios. En este sentido, Albert se mostró satisfecho de que “se esté continuando con el trabajo que comenzó Mari Carmen Taulé el año pasado”.
El fin fundamental de este Pacto Territorial es lograr una amplia colaboración de las administraciones para vertebrar territorialmente el servicio de empleo, con estructuras normalizadas, sin duplicar servicios e impulsando la coordinación a distintos niveles entre diferentes administraciones y la colaboración público-privada. Con ello, se busca crear un abanico de oportunidades de futuro, fundamentalmente basadas en el turismo, pero también en todos los ámbitos de desarrollo del territorio.
Asimismo, los municipios que integran este organismo trabajan para paliar problemáticas comunes en lo referente al mercado de trabajo y la empleabilidad de los demandantes de trabajo, como la baja o inadecuada formación, elevado índice de desempleo femenino, elevada precarización del empleo, escaso reciclaje profesional, existencia de colectivos en riesgo de exclusión social, analfabetización informática, escaso espíritu emprendedor, desconexión entre las necesidades de las empresas y la oferta formativa existente.