La portavoz del PSPV-PSOE en el Ayuntamiento de Orpesa, Maria Jiménez, ha denunciado este martes la «grave división interna en el gobierno local», al afirmar que Araceli de Moya deja la alcaldía “con un equipo totalmente enfrentado y sin rumbo común”. Durante el pleno celebrado, la socialista ha asegurado que la sesión ha dejado claro que “la confianza entre ellos está hecha trizas”, con votos dispares y reproches cruzados entre los miembros del ejecutivo municipal.
El pleno ha servido para aprobar el Plan de Acción por el Clima y la Energía Sostenible (PACES) y la adhesión a la Red de Entidades para el Desarrollo Local, dos puntos que solo han salido adelante gracias al apoyo del PSPV. Según ha subrayado Jiménez, VOX ha tratado de frenar ambas iniciativas, aunque finalmente no ha logrado bloquearlas.
Críticas a VOX y al equipo de gobierno saliente
Jiménez ha lamentado que “esta adhesión llegue tarde y mal, a pocos días de que acabe el plazo, pero tiene una explicación: cuando tienes dentro del Ayuntamiento a un enemigo activo como es la extrema derecha; una alcaldesa que huye de sus responsabilidades y un futuro alcalde que se lava las manos, nada puede salir bien”. En su intervención, ha acusado al equipo de gobierno de trabajar siempre “contrarreloj”.
La portavoz socialista ha cargado especialmente contra VOX, calificando de “realmente grave que haya partidos que nieguen el cambio climático, cuando hace pocos meses una barranada y un Consell negligente se cobraron la vida de 228 personas”. Además, ha criticado la postura de los ultraderechistas al cuestionar los fondos para políticas verdes, pero no oponerse a “más de medio millón de euros en publicidad, propaganda, comilonas y sueldos desorbitados del equipo de gobierno”.
Advertencias y presión al nuevo alcalde
Aunque el PSPV votó a favor de la incorporación a la red de desarrollo local, Jiménez advirtió que “esto no puede ser una excusa para hacer turismo institucional ni para justificar viajes a cargo de los fondos públicos”.
También ha cuestionado la gestión de Araceli de Moya, a quien reprocha que “en su mandato apenas ha aprobado proyectos, y los pocos que ha anunciado han quedado en humo”. Como ejemplo, recordó que “ya hace tres meses del sainete sobre la incorporación de personal, y no solo no ha llegado nadie nuevo, sino que se ha ido algún técnico más”.
Jiménez ha exigido que se trabaje de verdad en el plan para que repercuta en la llegada de fondos europeos, y ha reivindicado el potencial de Orpesa. “Deben centrarse en lo que realmente importa: gestionar, cuidar los servicios sociales, mejorar y ampliar infraestructuras, promover la actividad cultural y deportiva, defender nuestro patrimonio…”.
Finalmente, ha avisado que el grupo socialista estará vigilante para que, con el nuevo alcalde del PP, Rafael Albert, “el Ayuntamiento no siga hundiéndose en la parálisis, las enemistades entre partidos y las envidias dentro del propio gobierno”.