Eva Bellido // Benicàssim
Final feliz para una historia que se gestó este verano, en la playa Morro de Gos de Oropesa. Y es que un pez raya al que hirió un bañista con un arma blanca se ha recuperado en la Fundación Oceanogràfic y ha regresado ya a su hogar, el mar.
El ejemplar fue trasladado al centro con lesiones graves el pasado 6 de agosto, tras aproximarse a la orilla y ser apuñalado.
Según explican a este periódico fuentes cercanas al caso, el hombre actuó pensando que había peligro para las personas que disfrutaban del litoral en plena temporada. En concreto, desde el Seprona de la Guardia Civil detallan que comía sandía en la arena cuando escuchó gritos y optó por usar el cuchillo al creer que estaba atacando a alguien. Después se mostró consternado y fue abucheado por los presentes.
La Red de Varamientos se hizo cargo de la raya pelágica (Pteroplatytrygon violácea), que fue bautizada con el nombre de Amparo, y la llevó al Oceanogràfic de València con una herida profunda cerca del arco branquial.
En cuarentena
Después de someterla a un tratamiento de choque en el departamento de cuarentena para evitar su muerte y una ecografía para descartar que estuviera embarazada, se le sometió a diversas curas complementarias y a una alimentación especial hasta que recuperó su salud y las fuerzas para volver al mar, según informaron desde la Fundación Oceanogràfic.
En un principio se pensó que podría haber salido a la orilla por estar encinta. Después, tras el examen, se descartó. A veces, también van a la costa por cambios de temperatura del agua.