La alcaldesa de Orpesa y portavoz de la agrupación liberal de Ciudadanos, Araceli de Moya, discrepa con su socio de gobierno de Vox y rechaza que Escola Canta adoctrine a los niños, como manifestó el concejal de Cultura, Juan García.
Y es que el edil de su tripartito anunció el viernes su orden de retirar los 4.500 euros que el Ayuntamiento suele destinar cada año a esta iniciativa en los centros educativos al considerar que es un proyecto «disfrazado» que trata de «imponer la Agenda 2030».
De Moya mostró su descontento por haberse enterado «por la prensa» y no abordarse este asunto en ninguna reunión previa. «No estoy de acuerdo, no creo que lo hayan meditado, lo primero es conocer el proyecto en profundidad, y creo que se ha utilizado para hacer política».
He revisado las letras de todas las canciones y contiene mensajes que todas las personas de bien compartimos, como luchar contra la pobreza o las guerras»
Araceli de Moya, alcaldesa de Orpesa
La munícipe aseguró, tras haber revisado las letras de todas las canciones, que contienen mensajes que «todas las personas de bien compartimos, como luchar contra la pobreza, las guerras y la discriminación, defender la igualdad o cuidar del medio ambiente para tener un planeta mejor». «Invito a todo el mundo a entrar en la página de la Conselleria de Educación, donde está todo el material del proyecto, y que juzguen por sí mismos».
Asimismo, la primera edila manifestó que «no aprobamos el adoctrinamiento, pero tampoco el sectarismo, aceptamos todas las sensibilidades, aún no compartiendo todos los extremos de la Agenda 2030, los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) son perfectamente defendibles, encomiables y buenos para toda la sociedad», aseveró De Moya.
Próxima reunión
Por todos estos motivos, la munícipe comunicó que el martes «tenemos una reunión de equipo de gobierno municipal, aprovecharé para hablar con los dos miembros de Vox e intentaré hacerles recapacitar».
«Es un proyecto al que, además, se adhieren los centros educativos que lo desean y no podemos tomar decisiones que vayan en contra de la comunidad educativa, a los que agradezco su trabajo y sé que velan porque se haga todo con una perspectiva global y no sectarista».
Pese a estas discrepancias, De Moya continuó mostrándose convencida de que es «más lo que nos une que lo que nos divide, hay más gestión beneficiosa para el pueblo de Orpesa y respetamos la libertad de cada partido».